Hace poco celebramos el bautizo del chiquitín, y tenía muy claro dónde íbamos a hacer la comida, ya que repetimos el mismo restaurante donde celebramos el de la mayor: En el Palacio Larrea Berria de Barakaldo.
Es un restaurante que queda relativamente cerca del metro, así nadie tiene que ir en coche y tenerse que preocupar de aparcar, o de no poder beber unos vinitos durante la comida. Los comedores son espaciosos, y teníamos uno casi entero para nosotros. La atención de los trabajadores perfecta, siempre a nuestro ritmo, ¡¡hasta esperamos para sacar la tarta porque el enano estaba de siesta!! La comida muy rica, de buena calidad y con unas buenas raciones. Y os estaréis preguntando, vale, un restaurante bueno, ¿y qué mas? Pues queda lo mejor: ¡¡¡el ático está preparado con juegos para los niños!!!
Así que los peques comieron y enseguida subieron para arriba, donde se pasaron tooooda la tarde.
En el comedor hay televisiones en los que estás viendo continuamente a los peques jugando, y tienen unos monitores que se encargan de cuidarlos y entretenerlos en todo momento. Nuestros txikis jugaron, dibujaron, les pintaron la cara...vamos, ¡¡que no querían irse!!¡¡ Los mayores aún se acordaban de cuando estuvimos la vez anterior!!
Si tenéis cualquier evento, o simplemente una comida familiar o con amigos, no lo dudéis, el palacio Larrea Berria es una gran opción.
Es un restaurante que queda relativamente cerca del metro, así nadie tiene que ir en coche y tenerse que preocupar de aparcar, o de no poder beber unos vinitos durante la comida. Los comedores son espaciosos, y teníamos uno casi entero para nosotros. La atención de los trabajadores perfecta, siempre a nuestro ritmo, ¡¡hasta esperamos para sacar la tarta porque el enano estaba de siesta!! La comida muy rica, de buena calidad y con unas buenas raciones. Y os estaréis preguntando, vale, un restaurante bueno, ¿y qué mas? Pues queda lo mejor: ¡¡¡el ático está preparado con juegos para los niños!!!
Así que los peques comieron y enseguida subieron para arriba, donde se pasaron tooooda la tarde.
En el comedor hay televisiones en los que estás viendo continuamente a los peques jugando, y tienen unos monitores que se encargan de cuidarlos y entretenerlos en todo momento. Nuestros txikis jugaron, dibujaron, les pintaron la cara...vamos, ¡¡que no querían irse!!¡¡ Los mayores aún se acordaban de cuando estuvimos la vez anterior!!
Si tenéis cualquier evento, o simplemente una comida familiar o con amigos, no lo dudéis, el palacio Larrea Berria es una gran opción.