Todos sabemos lo complicado que es a veces entretener a los peques. ¿Dónde quedaron esos tiempos en los que podías tomar un café con una amiga con total tranquilidad y mantener una conversación sin interrupciones? Sin amatxu me aburro, amatxu pis... jajaja.
A nosotros además nos gusta mucho ir a comer o cenar por ahí cuando podemos, y queremos que nuestra enana esté tranquila sentada en la mesa jugando, y no corriendo por ahí o molestando al resto de clientes, y creo que si se acostumbran desde pequeños será más fácil. Por esto mismo siempre llevamos un kit de entretenimiento, y hasta ahora nos ha dado muy buen resultado.
Os explico un poquito de qué consta nuestro kit, aunque lógicamente, no a todos los niños les gustan las mismas cosas ni se entretienen con lo mismo:
- Una cosa que siempre siempre llevamos es un cuento para pintar y unas pinturillas. Pintar la entretiene muchísimo, aunque los aitas también terminamos pintando a Bob esponja o a Dora la exploradora.
- Segundo imprescindible: pegatinas. Las pega y las despega una y otra vez de su plástico y de su cuento. Reconozco que las que son reutilizables las vuelvo a pegar y se guardan para la siguiente vez. En ocasiones también terminamos con pegatinas en las manos, en la frente... y los de alrededor nos miran no pudiendo reprimir una sonrisa al vernos.
- Tercero, algún puzzle sencillito, que pueda hacer ella solita.
- Si vamos a estar en la calle en una terraza, o en un parque al aire libre también llevamos una cajita de tizas. Se pone echa un cuadro pero como le encanta pintar, y en el suelo no tiene ocasión de hacerlo muchas veces... le encantaaaa!!! Y la ropa a la lavadora y punto.
- Y por último, y si todas estas cosas fallan...sí, lo reconozco, somos malos padres, jajaja, le ponemos un ratito youtube en el móvil con los dibujos que quiera con el volumen bajito, y paz.
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