Se acercan las navidades, unas fechas muy especiales y familiares, y llenas de ilusión cuando hay niños. Son las primeras navidades en las que mi hija se va a enterar un poco, ya que el año pasado solo tenía un mes y pico.
Ahora con un año, aun no va a entender el significado de estas fechas, pero ya va a poder disfrutar de las luces, la familia unida, los regalos...
De todas formas hay varios factores que hay que tener en cuenta para que todos pasemos estas fiestas lo mas agradablemente posible, ya que los bebés tienen sus hábitos y costumbres forjadas, y pueden agobiarse o aturullarse con tanto cambio, tanta gente y tantos regalos, por lo cual hay que intentar variar su rutina lo mínimo posible (aunque ya sabemos que esto es muy difícil) así que aquí van unos consejillos para intentarlo:
- Si la celebración se celebra en la propia casa del bebé es mucho mejor, ya que estará en un entorno conocido y familiar, con todas sus cosas, su cuna... pero si esto no es así, llevaros algunos juguetillos para que se pueda entretener, sentarle a la mesa con vosotros y evitar que la familia le agobie con besos, abrazos y carantoñas varias. Además mirar por la seguridad del niño, ya que al encontrarse en casa ajena, su curiosidad le "obligará" a explorar cuanto le rodea y se dedicará a patrullar todas las habitaciones a las que tenga acceso.
- Si vamos a comer o cenar tarde (como suele suceder en estas fechas) asegurarnos de darle de comer a él primero, aunque luego esté con nosotros en la mesa.
- Aunque queramos que pruebe de nuestra comida, tener siempre la suya propia preparada y no le deis peladillas o alimentos que puedan no sentarle bien.
- Intentar respetar en lo posible la hora de la siesta y de acostarse por la noche. Que duerma una siesta larga es una buena opción si queréis que aguante un poco mas de su hora habitual por la noche, pero sin pasarse, que estarán agotados con tantas emociones y novedades.
- Si va a dormir fuera de casa llevar objetos que le sean conocidos: su mantita, su peluche...
- Tener paciencia al darle los regalos. En estos momentos nos hace mas ilusión a los adultos que a los niños, y pueden llegar a angustiarse con mucha facilidad.
- Aunque a nosotros nos puedan parecer muy entrañables los Reyes Magos, el Olentzero y papa Noel a los ojos de un niño pequeño son personajes que pueden dar respeto, no hay que obligarles a que se acerquen o ponerles en sus rodillas por mucho que a nosotros nos encante la idea de hacer la foto de rigor.
- Si queremos llevarles a ver la cabalgata de los reyes, evitar en lo posible las largas esperas, las grandes acumulaciones de gente, los tumultos y los caramelos (que a veces parece que tiran a dar)
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